En el interior, la tapicería es de símil cuero con un patrón hexagonal y costuras en verde lima, una tonalidad que también está presente en las salidas del climatizador. El tono negro se extiende también a las secciones inferiores de los parachoques, los pasos de rueda, los embellecedores de las puertas y los retrovisores exteriores, y confiere a la carrocería un aspecto más atlético y dinámico. Las llantas de aleación de 19 pulgadas tienen un acabado en negro metalizado. El habitáculo destaca por su confort, calidad, diseño y funcionalidad. Compite de igual a igual con los mejores coches de su segmento y transmite sensaciones premium a todos los niveles. El puesto de conducción tiene una configuración inteligente, con todos los controles y mandos importantes dispuestos ergonómicamente en torno al punto focal del volante.
En materia tecnológica y de conectividad, Mazda ha mejorado notablemente la comodidad, tranquilidad y seguridad con una combinación formada por la aplicación MyMazda, un monitor de visión 360% y un sistema de alarma antirrobo de serie, con sensor de intrusión y sonido. La amplia pantalla central se activa más rápido y ofrece un mayor contraste, gracias al uso de tecnología de transmisión digital. En lo que respecta a la seguridad, destacar el nuevo asistente de tráfico y crucero, los faros adaptativos y el sistema de asistencia a la frenada en ciudad avanzado, que emplea una cámara de visión delantera para detectar vehículos y peatones, tanto de día como de noche. También incorpora alerta de cambio involuntario de carril, de ángulo muerto y control de crucero adaptativo.
La gama de motores está formada por dos unidades de gasolina y otras dos diésel. Aquellas erogan 165 CV y 194 CV y están disponibles en versión de tracción delantera o tracción integral. Las versiones manuales del 2.0 Skyactiv-G y todas las del 2.5 Skyactiv-G disponen de sistema de desactivación de cilindros.La gama se completa con dos motores diésel 2.2 Skyactiv-D en versiones de 150 CV, combinándose con una caja manual y tracción delantera, que eran el propulsor, cambio y motricidad de la unidad de pruebas cedida por la marca a nuestro digital, o la de 184 CV, con transmisión automática y con tracción delantera o integral. En los modelos 2.2 Skyactiv-D, como el que nos ocupa, se ha optimizado la fuerza de accionamiento del pedal del acelerador, para que el conductor pueda controlar la aceleración y la deceleración del vehículo con mayor facilidad y precisión.
Al volante, la última generación del Mazda CX-5 atesora una experiencia de conducción más cómoda y agradable, incluso en trayectos largos. Observamos una evolución de la carrocería, la suspensión y los asientos que mejoran el confort de marcha y minimizan la fatiga y una reducción notable del ruido de rodadura, sobre todo en el caso de circular en superficies irregulares como grava. Se puede elegir el modo de conducción más adecuado con solo pulsar un mando. El modo de conducción seleccionado se muestra en la pantalla TFT de 7 pulgadas del cuadro de instrumentos. Con el fin de mejorar el confort y la calidad de marcha, se han modificado las características de amortiguación de los muelles de la suspensión con el fin de reducir el cabeceo de los ocupantes cuando el coche coge un bache o pasa por un badén.
En resumen, el nuevo Mazda CX-5 incorpora novedades en su equipamiento y funcionalidad interior, ofrece un selector de modos de conducción Mi-Drive, mejora su comportamiento dinámico y cuenta con un equipamiento de seguridad ampliado. El motor 2.2 Skyactiv-D nos pareció excelente en todos los parámetros a análisis: prestaciones, elasticidad, recuperaciones, silenciosidad, par motor y contenidos consumos. A la eficacia y eficiencia mecánica ayudan y mucho un cambio manual de 6 velocidades sensacional en cuanto a su accionamiento y escalonamiento. Un producto muy completo y muy interesante para todo tipo de usos, desde el día a día urbano y laboral, hasta el fin de semana de ocio y tiempo libre. El precio del Mazda CX-5 Skyactive-D 2.2 150 CV MT 2WD Newground es de 38.136 euros.