El lenguaje de diseño en el interior denota limpieza y pureza de formas. Las líneas horizontales que predominan en el salpicadero confieren al habitáculo una gran sensación de espacio y amplitud. La consola central está orientada al conductor, lo que subraya en cierta medida el carácter deportivo del coche. En el puesto de conducción, la pantalla se presenta como una superficie homogénea y perfectamente integrada. La mayoría de las funciones del vehículo se pueden controlar mediante dos pantallas. La selección de colores, tapicerías, inserciones e iluminación interior contribuyen a crear una atmósfera futurista y relajada. El maletero ofrece una capacidad de 535 litros, que pueden aumentar hasta los 1.390 litros si se abaten los respaldos de la fila posterior de asientos.
Audi ofrece una selección de hasta 39 sistemas de asistencia a la conducción divididos en tres paquetes: aparcamiento, ciudad y tour. Al igual que el A8, el nuevo Audi A7 Sportback va equipado con el controlador central de asistencia al conductor, que vigila el entorno de manera constante. Se basa en un conjunto de sensores que, en la versión más completa, incluye cinco sensores de radar, un escáner láser, una cámara frontal, cuatro cámaras de visión 360 grados y doce sensores de ultrasonidos. El asistente de parking y el de garaje dirigen automáticamente al coche tanto para entrar como para salir de ambos tipos de estacionamientos mediante el empleo de un smartphone.
La gama de motores arranca con el motor TDI de dos litros y cuatro cilindros 204 CV, 40 TDI, con motricidad delantera o a las 4 ruedas. A partir de esta potencia, todos son siempre tracción integral. Las versiones siguientes recurren a motor V6 de 3 litros: el 45 TDI (245 CV) y los 50 TDI (286 CV) y S7 (344 CV). En gasolina están los TFSI de 4 cilindros, 2 litros y 265 ó 340 CV. El tope de gama es el RS6 con motor V8 de 4 litros y 600 CV. Los híbridos enchufables entregan 299 y 367 CV. Nuestro protagonista, el Audi A7 Sportback 45 TDI quattro S-tronic tiene un motor gasolina de 1984cc con 4 cilindros situados en línea que alcanza una potencia máxima de 245 CV. Este propulsor consigue unos consumos medios 7,4 litros / 100 kms. Con ello, los niveles de emisiones se ubican en 146 gramos de CO2 por kilómetro.
Al volante, el producto combina dinámica y confort. Ofrece toda la agilidad posible en trazados sinuosos y toda la comodidad necesaria en autovía. La dirección dinámica en las cuatro ruedas ofrece un tacto directo con una estabilidad direccional superior. En el eje delantero cambia la desmultiplicación en función de las circunstancias; en el eje trasero, las ruedas giran en el mismo sentido que las delanteras o en sentido opuesto, en función de la velocidad. El diferencial deportivo distribuye de forma activa el par entre las ruedas traseras, complementando así al sistema de tracción total. La suspensión deportiva y adaptativa con control de amortiguación son gobernados por la plataforma electrónica de chasis. Gracias a ella, todos los sistemas trabajan de manera conjunta para mejorar la comodidad y la deportividad, así como para ofrecer la máxima precisión.
En resumen, el Audi A7 Sportback es un gran turismo de estilo renovado, que ofrece un alto grado de digitalización, una experiencia de conducción dinámica y un interior que comprende un amplio abanico de elementos enfocados a hacer más agradable la vida a bordo. La gran berlina coupé representa la esencia del nuevo lenguaje de diseño de Audi. El modelo alberga la línea de un coupé, el espacio de un sedán y la versatilidad de un Avant. Combina lo mejor de los tres mundos. Comparado con su antecesor, el interior ha ganado 21 milímetros en longitud. La berlina coupé, que emplea aluminio ligero en algunos componentes, obtiene las mejores calificaciones en rigidez, seguridad contra los choques, aerodinámica y aeroacústica. El precio de la gama A7 de Audi arranca de los 68.060 euros.
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