El deseo de armonía entre el lujo digital y el analógico tiene como resultado una configuración revolucionaria del interior, que despierta asociaciones con elementos del interiorismo moderno y el diseño de yates. La escultura formada por el tablero de instrumentos, la consola central y los apoyabrazos parece suspendida sobre un paisaje de gran amplitud. Se puede acceder a su interior sin necesidad de utilizar la llave. El habitáculo, amplísimo, define un nuevo nivel de lujo moderno, desconocido hasta la fecha. Los diseñadores han creado un espacio interior con el atractivo de un salón moderno y ambiente de bienestar, caracterizado por su elegancia, su valor intrínseco y su ligereza. El tablero de instrumentos es un detalle especialmente destacado por su nueva arquitectura, por la configuración moderna de las superficies y por la disposición ergonómica de los visualizadores.
En materia tecnológica hay un sinfín de gadgets. Por destacar uno de ellos reseñar la función Smart Home de MBUX. El vehículo puede convertirse en la central de mando del propio hogar. Las redes Wi-Fi y los modernos sensores aumentan la capacidad de comunicación con la vivienda. Es posible así supervisar a distancia la temperatura y el alumbrado, o la posición de las persianas, y conectar a distancia algunos electrodomésticos. Los detectores de movimiento y contactos en las ventanas informan acerca de posibles visitas, tanto deseadas como indeseadas. Pensando en los viajes largos de este devorador de kilómetros, en la nueva Clase S se han implementado diez programas de masaje diferentes.
Mecánicamente, nuestra unidad de pruebas, de motricidad integral, incorporaba un propulsor diesel de seis cilindros en línea generador de una potencia de 330 CV y unos imponentes 700 Nm de par, suficientes para catapultarlo de 0 a 100 en 5,4 segundos. Logra un gasto medio en ciclo WLTP de entre 6,7 y 7,9 l/100km. En diesel hay otra variante más básica y cuyo bloque tres litros de seis cilindros entrega 286 CV y 600 Nm. Y luego está la versión de gasolina denominada S 500 4Matic que cuenta con tracción a las cuatro ruedas y una motorización con un sistema de hibridación ligera que añade 22 CV y 250 Nm adicionales en momentos puntuales. La cifra de potencia total es de 435 CV, con un par máximo de hasta 520 Nm. Todos ellos vienen ligados a un cambio automático 9G-Tronic con nueve relaciones.
Al volante, la nueva Clase S de Mercedes-Benz es más inteligente que nunca en numerosos aspectos. La experiencia de conducción alcanza un nuevo nivel. Las innovaciones digitales se completan con novedades destinadas a aumentar el placer de conducción y la seguridad. Entre ellas se cuentan la dirección del eje trasero, con un amplio margen de ángulo de orientación de las ruedas, y primicias en materia de seguridad como el airbag para las plazas traseras. Los sistemas de asistencia a la conducción perfeccionados constituyen un paso adicional en la hoja de ruta para la conducción autónoma. Es uno de los automóviles más aerodinámicos del mercado, y especialmente del segmento de las berlinas de lujo, con un coeficiente de 0,22. La tracción integral, las prestaciones seguras y los consumos ridículos lo convierten en un coche superlativo y objeto de deseo.
En resumen, el Mercedes-Benz S 400d 4Matic es un modelo y una versión que representan la fascinación de la legendaria marca por la búsqueda de la perfección automovilística y que se expresa en una técnica adelantada a su tiempo y una tradición artesanal, en combinación con innovaciones digitales. Insistimos en que hemos conducido uno de los mejores modelos del mundo. Muy pocos están a su altura. Conjuga la inteligencia artificial con 135 años de experiencia en la fabricación de automóviles. El fabricante germano puso la primera piedra de esta serie de modelos hace unos 70 años con la presentación del 220. Desde su lanzamiento al mercado en el año 1951 se han entregado ya más de 4 millones de berlinas de la Clase S. El precio de partida de nuestro protagonista es de 117.700 euros.
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