El sector de las dos ruedas cuenta con una gran tradición en España y la adquisición de sus vehículos, cada vez más demandados por la sociedad, se ha multiplicado por dos entre 2013 y 2019. En España hay 5,5 millones de motos y el año pasado, las matriculaciones de motos supusieron el 12% del mercado total de automoción en España.

En el ámbito de transición ecológica y el transporte se han trasladado propuestas para optimizar el uso de la moto como alternativa sostenible de transporte, con medidas específicas en materia de movilidad, seguridad vial o renovación del parque, para favorecer una reducción de la antigüedad media que en estos momentos es de 16,4 años.

Cada vez hay más oferta de motos eléctricas en el mercado y las convencionales, con mayor autonomía, cubren necesidades de movilidad diferentes con la máxima eficiencia. Por esto, el crecimiento de los vehículos ligeros durante los últimos años era una realidad antes de la crisis. Contribuir de forma activa a fomentar la seguridad y mejores condiciones en los desplazamientos de los usuarios de e-bikes, ciclomotores, motocicletas, triciclos y cuadriciclos favorecerá a la sociedad en su conjunto.

En la nueva movilidad es evidente que van a ganar presencia los peatones y la bicicleta, pero también los vehículos ligeros por su capacidad para cubrir rangos mayores de distancia. Estos tres colectivos son los considerados por la Organización Mundial de la Salud como “vulnerables” y pacificar el tráfico con medidas necesarias como ampliar las zonas 30 fuera de las grandes arterias de comunicación.

La actual crisis ha golpeado con dureza a la sociedad y a la economía, y las empresas del sector de las dos ruedas no han corrido mejor suerte. El mercado en abril se desplomó un 93% con apenas 1.000 unidades matriculadas, récord histórico negativo desde que existen registros (1957). El riesgo de la desaparición de empresas, especialmente las pymes, y el mantenimiento del empleo suponen un desafío de grandes proporciones.

En lo referente al ámbito empresarial, Anesdor apoya junto al resto de asociaciones sectoriales de automoción la solicitud de un plan de choque.

En línea con lo planteado por el conjunto de la automoción, Anesdor ha destacado la importancia de que se concreten medidas. Primero para asegurar la supervivencia de las empresas y su operatividad en aspectos como garantizar la liquidez, el impulso y la flexibilidad en la contratación o la fiscalidad. Y también de apoyo a la industrialización, los procesos de importación y exportación, y la reactivación del mercado, mediante un plan de incentivos que estimule las compras.

Es necesario que estas medidas incluyan a los vehículos ligeros y tengan en consideración sus particularidades, según Anesdor, por lo que se ha puesto a disposición de los tres ministerios para contribuir en el desarrollo de estos planes.

Adicionalmente, se ha remarcado también la creciente importancia del sector de las dos ruedas en el turismo. El mototurismo es una tendencia creciente con un gran potencial de futuro en el marco de la nueva movilidad para el desarrollo económico, especialmente en las zonas rurales.


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